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La confrontación perenne contra el Gobierno Nacional que sostiene la Gobernación del estado del Zulia es la razón por la cual Francisco Arias Cárdenas, candidato principal por lista en esa entidad, asegura que la oposición presenta un agotamiento estructural, relativo a su forma de hacer política en la región
Para el candidato del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) en el Zulia, ninguna instancia de poder regional o municipal debería ser usada para conspirar contra el Gobierno Central, tal como a su juicio sucede con la gobernación de esa entidad
«En todo caso debería haber una competencia para mejorar el nivel de vida de la gente, no una conspiración abierta contra el Gobierno», consideró Arias Cárdenas, quien anunció que se entregará «de lleno» a la campaña electoral para recuperar espacios que en su opinión se perdieron por falta, fundamentalmente, de unidad.
«Hay mucha expectativa de profundizar los logros de la Revolución en Zulia y corregir los errores cometidos. Me voy a dedicar por entero a la campaña».
«Los primero que requiere una contienda electoral es ordenar las fuerzas y verificar constantemente al enemigo. Eso es lo que estamos haciendo en esta fase de pre-Campaña electoral. En el Zulia lo más importante es fortalecer la unidad y dejar a un lado los roces».
«Sabemos que la pelea en el Zulia será dura porque ellos ganaron la Gobernación del estado y la Alcaldía de Maracaibo, pero nosotros (la Revolución) ganamos 14 de los 21 municipio del estado», comparado por Arnaldo Olivares, integrante del Buró político del PSUV en el Zulia, entidad que concentra la mayor masa electoral en todo el país.
«Ya nosotros tenemos el 100 por ciento de las UBB-200 conformadas en todo el estado y 97 por ciento de las patrullas, todo lo cual es significativo», informó Olivares al tiempo de identificar las causas por las cuales la oposición mantiene todavía espacios de poder en ese estado.
Dijo que el estado Zulia no sólo es un estado gobernado por un «agente paramilitar», como lo señala la diputada Iris Varela en referencia al gobernador Pablo Pérez, sucesor de Manuel Rosales, hoy prófugo de la justicia venezolana. «También es un estado que limita con Colombia, considerado el principal productor de droga en el mundo».